No importa qué tan cuidadosas seamos: todas las mujeres llegamos a tener al menos una cicatriz importante en la vida. Puede ocurrir tras extirpar una dañada vesícula o apéndice; o quizás en medio de la lucha por traer a un hijo al mundo.; sino, está la tercera opción: sufrir un accidente grave... lo cual vendría siendo mi caso. Pero como esta nota no se trata de mí, les dejo algunas ideas para cuidar, atenuar y sanar más rápido esas marcas que va dejando la vida sobre nuestras pieles.
1) La favorita de los médicos: Cicapost
Esta crema reparadora está formulada específicamente para el cuidado de las cicatrices, sean post-operatorias o accidentales. Contiene aceite de rosa mosqueta, extracto de centella asiática, Vitamina A, glicerina y otros compuestos químicos como la Niacinamida y el Dexpantenol. Gracias a estos ingredientes activos, mejora la apariencia, elasticidad, coloración y picor de la marca. Basta con aplicarla 4 a 5 veces al día en la zona afectada y masajear. El tubo contiene 50 gramos y puedes conseguirlo en cualquier farmacia por alrededor de 12 mil pesos.
2) La más dulce de todas: Pomada de propóleo
Este poderoso desinfectante y antibiótico natural ha sido utilizado durante décadas para sanar heridas. ¿Pero qué es el propóleo? Esta resina es elaborada por las abejas para proteger sus colmenas y repararlas en caso de grietas. Sobre la piel tiene efecto antiinflamatorio, regenerador, anestésico y desinfectante, por lo que es una alternativa sana y barata para cuidar las cicatrices. Hay de variadas marcas: yo me conseguí una pomada Multi Pétalos Colmenares y el pote de 100 cc no costó más de 5 mil pesos. Se pueden encontrar en las farmacias naturistas.
3) Un clásico televisivo: Cicatricure
Esta crema la vemos constantemente en los comerciales del domingo en la mañana: se trata de un compuesto formulado para cicatrices de cirugías, lesiones, quemaduras, acné y estrías. Promete disminuir la inflamación y activar el proceso de regeneración de la piel. A pesar de que lo promueven como un descubrimiento milagroso, contiene compuestos típicos de las cremas cicatrizantes naturales: centella asiática, aceite de bergamota, manzanilla, cebolla y concha de nácar, entre otros. Tiene varias presentaciones, pero el gel suele ser el ideal para este caso y viene en dos tamaños: 30 y 60 gramos.
4) Con suavidad termal: Cicalfate
Esta crema es un reparador-cicatrizante de la marca Eau Thermale Avène, ideal para recuperarse después de sufrir una lesión; aunque también es útil para atenuar marcas de acné, arrugas, aliviar quemaduras y cuadros de dermatitis. Tiene cuatro efectos: calmante (gracias al agua termal), antibacteriano (pues contiene sulfato de zinc y de cobre), secante y cicatrizante. Se encuentra en cualquier farmacia y su precio ronda los $15.000.
Hay que recordar que estas cremas nunca se deben aplicar en heridas abiertas y que sólo atenúan, ayudando a regenerar más rápido las cicatrices, pero jamás las borrarán del todo. Antes de obsesionarte con una marca, recuerda que casi todos tenemos una, así que ¿cuál es el problema con mostrarla?