Cuando la sonrisa de alguien es radiante y blanca, se contagia, ¿no? A continuación, te contaré sobre algunos secretos de la naturaleza para que puedas entender cómo tener dientes más blancos, y sonreír con confianza y sin preocuparte. Nuestro estilo de vida trae algunos desafíos cotidianos que atentan contra la salud bucal; el café que compartes con un colega, o fumar, ocasionan manchas y una coloración amarillenta en los dientes. Generalmente no corremos a lavarnos los dientes apenas terminamos de fumar o de tomar una taza de café, por lo que las manchas parecen inevitables. Ahora te doy algunos tips para una sonrisa más bella.
- Peróxido de hidrógeno, o agua oxigenada: El agua oxigenada, a mediano plazo, es excelente como enjuague bucal, pero debes utilizarla diluida en agua para no dañar ni el esmalte de los dientes ni la mucosa oral, que tiende a insensibilizarse si hay un uso excesivo de este producto. Puedes diluir en medio vaso de agua dos cucharadas de agua oxigenada, y con esta solución enjuagarte la boca después del cepillado, sin tragarla. Además del beneficio estético, el agua oxigenada es un antibacteriano, lo que contribuirá a la salud de tu boca.
- Bicarbonato: El bicarbonato está recomendado para tener dientes más blancos rápidamente, ya que tiene cierto poder abrasivo, por lo que no debe utilizarse con frecuencia. Para no preocuparte, el índice de abrasividad del bicarbonato es relativamente bajo, aún en comparación con algunos componentes de las pastas dentales, por lo que no daña el esmalte. Para lograr un blanqueamiento dental debes poner un poco sobre tu cepillo de dientes y luego cepillarte como lo harías normalmente, si bien el blanqueamiento que obtendrás es discreto, y útil sólo para las tinciones externas de los dientes, es decir, para las manchas superficiales, no para aquellas que provengan de alguna enfermedad dental. Este producto también es antimicrobiano.
- Un lavado frecuente: hay algunas cosas con las que debemos tener una atención especial para tener dientes más blancos. Las causas más generales de las manchas o el color amarillo en el esmalte dental corresponden a algunas bebidas que consumimos en el día de manera casual, casi sin enterarnos, como el café, el té, o el vino tinto. Estas bebidas contienen taninos y colorean el esmalte, por lo que luego de beberlas, y especialmente si eres una consumidora asidua de alguna de ellas, es aconsejable no esperar mucho tiempo para el siguiente cepillado dental. De hecho, si lo hicieras inmediatamente después, no habría ninguna consecuencia para el color de tu esmalte.
- No fumar: Muy difícil para algunas, ¿verdad? Sin embargo, incluso reducir la cantidad de cigarrillos al día incidirá directamente en el color de tus dientes, junto con cepillarte, en lo posible, después de fumar.
Finalmente, como ya sabrás, existen alternativas en el caso del café o del té igual de reconfortantes y energizantes, como el té de jengibre, el té blanco, o el té verde, que afectan menos el color de tu dentadura y siguen siendo exquisitos. Anímate a probar nuevas infusiones que, además, pueden ser muy buenas para tu salud.