3 problemas de belleza comunes después de los 30

A partir de los 30 años, nos empiezan a azotar diversos problemas de belleza que antes no eran preocupación. De este modo, notamos como los años no pasan en balde y van dejando huellas en la piel, cabello y cuerpo. Pero ¡a no deprimirse, chicas! Cada problema estético tiene una solución y no, no es la cirugía: sólo basta con que estemos atentas y pongamos atajo ante los signos de aparición. Por eso, en idBelleza elaboramos un listado con las afecciones más comunes, a fin de ayudarte en su identificación.

1. Canas: a algunas antes, a otras después; pero tarde o temprano llegarán a complicarnos la vida. Estos nada estéticos hilitos plateados para muchas son sinónimo de senectud, y llegan anunciando el declive de los años de gloria. Por eso, queremos eliminarlas a la brevedad, con la precisión con que lo haría un sicario. Obviamente, esto suma unos cuantos números a nuestro presupuesto.

¿Qué hacer? Pues escoger buenas marcas, cuya duración garantice que la inversión será más espaciada. Algunos salones poseen productos italianos de muy buena cantidad. También puedes comprarlos tú misma: en Casa Pichara encuentras distintas colecciones de Elgon, que se mantienen por más tiempo sin provocar un desbarajuste en tu bolsillo.

También puedes aprovechar esta nueva necesidad para innovar con tu look, cambiando el tono de tu cabello o adoptando un corte que te favorezca y disfrace un poco las hebras disonantes (los cortes en capas son perfectos para eso).

2. Líneas de expresión y flaccidez: en esta etapa de nuestra vida, disminuye naturalmente la producción de colágeno, lo que se traduce en que las muecas del día a día nos queden impresas en la piel. Además, algunas zonas del rostro - como la de los pómulos - pierden elasticidad, lo que hace full necesaria la intervención de una crema que combata efectivamente los signos de la edad.

En el comercio puedes encontrar muchas alternativas, pero si optas por invertir en una de mejor calidad, el cambio se notará en menor tiempo. Además, te bastará con una aplicación mínima - del tamaño de una arveja - para dar cobertura a todo tu rostro, por lo que un pote de 50 gramos bien podría durarte meses. En idBelleza recomendamos las líneas dermocosméticas de Clinique, Natura y Kiehl's. También Anew, de Avon, es una buena opción (muy amigable con el bolsillo, lo cual se agradece).

3. Ralentización de la pérdida de peso: desde que soplamos 30 velitas, los cambios metabólicos se hacen evidentes. Si antes podíamos sobrevivir un día completo con una galleta de avena o una sopa, ahora se nos hace imposible. Y aún más, bajar todos aquellos alimentos extra que consumimos es tarea titánica. Es algo con lo que debemos acostumbrarnos a vivir, para lo cual serán necesarios algunos ajustes en nuestra rutina. Visitar el gimnasio periódicamente, llevar una alimentación más saludable, beber abundante agua y dormir lo necesario son conductas clave para mantener nuestro peso a raya, sumando experiencias a nuestra vida y no kilos de más.

Como ves, pasada una edad, nuestro cuerpo comienza a hacer de las suyas. Pero ¡nada es tan terrible! . Comprando de manera inteligente y manteniendo hábitos saludables, podremos llevar los años con la misma belleza y actitud sexy de siempre, sin sobrepasar demasiado nuestro presupuesto mensual.