Ya antes le he hablado de la deshidratación en la piel. Y sí, quedé muy impactada cuando a mí me sucedió. Porque era un problema que no cejaba y no había producto que me hiciera bien o combatiera mi “desgracia” (excepto mi Moisture Surge, claro). La irritación, las descamaciones y heridas sólo por contacto se hicieron mega frecuentes.
Pero, ¿por qué se da este problema? Si bien existen algunas señales que indican que estamos padeciendo deshidratación, este post apunta a identificar sus causas, para así prevenir que comiencen a azotarnos. Por eso, ¡toma nota y pon freno a este desastre cutáneo!:
1. Exposición solar: La luz ultravioleta causa estragos en la piel. Si te expones constantemente a ella, sin aplicar un buen bloqueador, tu cutis se deshidratará y sufrirá ¡horrores!.
2. Factores climáticos: Es típico que en verano, cuando caen los patos asados en el exterior, nuestra oficina está fresca y agradable gracias al salvador aire acondicionado. Asimismo, en invierno, cuando sopla el viento y el frío azota, estamos temperadas gracias a la calefacción. Pues bien, las sensaciones son ricas, pero a menos que dispongamos de una buena crema hidratante, nuestra piel no estará disfrutándolo de igual forma.
3. Productos cosméticos inadecuados: Hace un tiempo, creyendo que el acné se debía a zonas grasas en mi piel - y no a la deshidratación, como finalmente fue - compré muchos jabones de tratamiento que terminaron por irritar totalmente la zona. Y es que el uso de productos que no son adecuados para tus condiciones no hace más que poner acento en los problemas que te ocupan. ¡De ahí la importancia de consultar a un buen dermatólogo!
4. Alimentación incorrecta: Si pasas el día corriendo de aquí para allá y con suerte te sientas 5 minutos a disfrutar un hot dog, ¡estamos mal! Hay alimentos muy saludables que nos ayudan a hidratar el organismo. Si los reemplazamos por grasas saturadas y apenas bebemos algún líquido, difícilmente nuestra piel tendrá el agua que necesita.
5. Vicios: El tabaco y al alcohol no sólo son nefastos para la salud de los pulmones, el hígado o el corazón, sino también para tu cutis. Recibir el humo del cigarrillo o percibir los efectos del alcohol en la sangre le hace ¡pésimo!, provocando la temida deshidratación.
Y tú, ¿qué harás para evitar este padecimiento?