La gemoterapia se utiliza como método de curación de males del cuerpo y del alma desde hace muchísimos años, desde los egipcios, pasando por fenicios y celtas. Tenemos piedras curativas en todas partes del mundo, son abundantes y al alcance de cualquiera.
No muchos saben la influencia que tienen piedras como el cuarzo, en nuestra salud física y en nuestro estado de ánimo, pero lo cierto es que si nos aqueja alguna enfermedad o estamos tristes, podemos ayudarnos de estos lindos cristales, que además cumplen la función de adornar. Como sabemos, todo es energía, y esa energía además se transmite, y se encuentra en todos lados. Las piedras preciosas y semipreciosas tienen la capacidad de trasmitir y mutar la energía, corrigen los patrones de energía del organismo y es así como ayudan a sanar malestares y problemas de salud. Si una persona está enferma y toma sus medicamentos, éstos lo que hacen es reparar el cuerpo físico, mientras que los cristales trabajan movilizando la energía estancada, es decir, se realiza la curación con energía pura.
El cuarzo rosado, por ejemplo, alivia las penas del corazón y la soledad. Es la piedra del amor universal, que incluye el autoestima. También es la piedra de la felicidad. Llévala contigo en una pulsera o collar, o incluso puedes llevar una piedra en tu bolsillo. Posee propiedades curativas y metafísicas. Buenas vibras, amor, compasión. Síndrome premenstrual, libera tensiones y ayuda en la fertilidad, para aquellas que buscan ser madres. Es la piedra de la curación emocional.
La amatista es la piedra de la mente. Ayuda a calmar y aclarar los pensamientos. Úsala si quieres estar en contacto con tu intuición, tus sentimientos, o tus valores. Especial para las adicciones (tabaquismo, alcoholismo, drogas) Limpia, purifica y estabiliza. Paz, estabilidad, perdón, tolerancia. Ayuda con los dolores de cabeza, insomnio, fibromialgia, nerviosismo. Fortalece el sistema inmunitario.
El lapislázuli, nuestra piedra chilena (bueno, no es exclusivamente nuestra, pues en Afganistán también se puede encontrar) es una piedra espectacular para fortalecer las relaciones, los sueños y las habilidades psíquicas, equilibra el ying y yang, potencia la sabiduría, la vitalidad. En cuanto a la salud física, ayuda con la depresión, fortalece el sistema inmunológico, es bueno para la garganta, el timo, la tiroides, los huesos, el insomnio, y dolores de espalda.
La aventurina, la clásica piedra verde que solemos confundir con el jade, es especial para la suerte. Es fácil recordarlo, ya que su color es el mismo del trébol, que es un clásico símbolo de la suerte. La aventurina puede usarse para equilibrar y energizar el chakra del corazón. Se cree que ayuda a tratar problemas al corazón, pulmones, músculos. Ideal para los vampiros energéticos, esta linda piedra te ayuda a impedir que otros te quiten energía.
Para obtener los mayores beneficios de tus piedras, debes limpiarlas seguido con el chorro de agua de la llave, y cargar al sol. No permitas que otros toquen tus piedras,y si lo hacen, lávalas y vuélvelas a cargar.
¿Has comprobado la efectividad de las piedras en la salud física y emocional?