Cantautora, modelo y actriz francesa, Françoise Madeleine Hardy o más conocida como Françoise Hardy (omitiendo su segundo nombre) nació en París en 1944, siendo la primera cantante pop famosa y más conocida con su nacionalidad. Es considerada como la diva de la historia del pop francés, gracias a su voz dulce, aterciopelada y suave y a sus composiciones musicales basadas en grandes dosis de sentimentalismo y melancolía.
Su infancia fue bastante estricta a nivel de educación, puesto que pasó gran parte de su niñez y adolescencia internada en un colegio religioso. Era una niña extremadamente tímida, que buscaba su respiro en la música de la radio.
Uno de sus cumpleaños fue el momento que marcaría el antes y después de Françoise al regalarle una guitarra. A partir de ese momento empezó a recibir clases de música y canto, donde pocos años después, con tan sólo 17 años, haría que firmase un contrato con la discográfica Vogue.
Comenzó a actuar a principios de los años 60's por clubes parisinos, siempre guitarra en mano, grabando su primer single “Tous les garçons et les filles” un año después. Poco tiempo tuvo que transcurrir para que esta jovencita se convirtiera no sólo en una triunfadora en la música, sino en un icono de la belleza, gracias su físico intacto, su naturalidad e inocencia, que le permitieron consagrarse como una de las musas más aclamadas de grandes diseñadores, como Paco Rabanne.
Representar a Mónaco en el Festival de Eurovisión en el año 1963, hizo que crease alianzas importantes y que 3 años más tarde saltara al mercado musical americano gracias a la Metro Goldwyn Mayer, creando un acuerdo con su discográfica
Tras algunos amores públicos, se casó en 1981 con el también cantautor y actor Jacques Dutronc, con el que tuvo un hijo, Thomas, el que - siguiendo los pasos de sus padres -, se convirtió en un guitarrista renombrado del panorama musical francés.
Su vida debería haber sido un auténtico éxito después de todo esto, sin embargo, y tal como ella misma contó en un programa televisivo este mismo año, actualmente Françoise Hardy cuenta con graves problemas de salud. En el año 2004 se le diagnosticaba la enfermedad de Hodking, un cáncer del sistema linfático, que la llevó a pesar 35 kilos. En el mismo programa desvelaba también la amarga situación que estaba pasando por la muerte de su padre, derivada de las heridas causadas por un joven al que pagaba sus favores sexuales.
Sin embargo, pese a todo esto, la cantante anunciaba hace poco que no se retirará de la música (actualmente cuenta con 72 años), sino que tiene varios proyectos en mente que ya está materializando, como su contribución en un disco homenaje a Buddy Holly, uno de los héroes del rock.
Por lo tanto, tendremos a Françoise Hardy deleitándonos con su música unos cuantos años más. ¡Fantástico!