Jacqueline Lee "Jackie" (Bouvier) Kennedy Onassis, más conocida como Jackie Kennedy, nacida en 1929, fue mundialmente conocida por ser la mujer de uno de los presidentes más importantes de Estados Unidos, John F. Kennedy, convirtiéndose así en Primera Dama del mismo país en 1961, hasta que asesinaron a su marido dos años después. Tuvieron 4 hijos, aunque la primera murió al nacer.
Unos años más tarde, se volvió a casar con el griego Aristóteles Onassis, de ahí su segundo apellido. Su nuevo esposo era el hombre más rico del mundo en la época, al ser uno de los más importantes empresarios de la industria naviera.
Aunque empezó su carrera laboral como “fotógrafa indagadora” para The Washington Times-Herald, tras la muerte de su segundo marido se dedicó a la edición de libros, trabajo que ejerció durante los últimos 20 años de su vida. Existe un único libro autobiográfico que escribió junto a su hermana: “One Special Summer (Un verano especial)” en el que relatan un viaje por Europa que llevaron a cabo al graduarse, Jackie en la universidad (Bachelor of Arts en literatura francesa) y su hermana Lee en secundaria.
Desde joven, una de sus pasiones eran las carreras de caballos, deporte que practicó durante casi toda su vida.
Existieron muchos secretos en la vida de Jackie, sobre todo en temas personales y de salud. Sufría la enfermedad de Addison (deficiencia hormonal que ocasiona debilidad general y un cambio peculiar de la coloración de la piel), la cual le fue detectada a muy temprana edad. Por si esto fuera poco, tenía graves problemas en su espalda, los que tuvieron que ser tratados en quirófano, ocasión en que casi pierde la vida.
Su vida personal tampoco iba lo suficientemente bien. Su relación con John F. Kennedy no fue un amor de cuento. En una biografía que apareció sobre ella, se cuenta cómo su marido la engañaba con otras constantemente (el desliz con Marilyn Monroe fue un escándalo público), aunque ella hacía lo mismo como venganza o, al menos, eso decía. Era lo que podría llamarse un “matrimonio de conveniencia”, ya que ambos eran de la misma esfera social. Pero estos deslices hicieron que Jackie Kennedy estallara una noche y con unas cuantas copas de más, insultara a su marido cuando volvió a casa después de una noche de juerga. Este hecho provocó que la internaran por una semana en un centro psiquiátrico, apareciendo en su mente ideas suicidas. Sin embargo, esto terminó con el nacimiento de sus hijos.
El estilo elegante de Jackie fue mundialmente conocido: sus vestidos, su glamour. Siempre lucía perfecta, convirtiéndose en la primera dama mejor vestida de la historia. Esto le supuso no sólo ser un icono de la moda, sino también de la belleza. Una de las mujeres más imitadas del siglo XX, referencia para millones de mujeres hoy en día. Jackie poseía una belleza única; era un ejemplo de sofisticación y femineidad en cada acto público donde se la veía. Impuso lecciones de moda que aún conservamos e hizo grandes aportaciones en la manera de vestir.
Su accesorio número uno era sin duda esas grandes gafas de sol oscuras, que muchas veces llevaba puestas, ¿te acuerdas? Estoy segura que sí. Jackie Kennedy dejó un gran legado, un icono imborrable.