Aunque la belleza tiene mucho que ver con el ojo del observador que la aprecia, lo cierto es que la sociedad y el mundo de la moda, se encargan de imponernos una visión de lo que es considerado estético y digno de mirar. Piernas largas, estatura sobre el metro 70, cinturas estrechas y espaldas pequeñas, forman parte de lo que los diseñadores y portadas de revista quieren mostrar, como parte de lo que se considera hermoso. Por lo anterior, las mujeres curvilíneas, con caderas anchas, muslos gruesos y características latinas, no es algo que se ve a diario en los medios especializados de belleza. Es por eso que Jennifer López es una excepción a la regla, ya que a punta de esfuerzo y trabajo duro se ha ganado el espacio que muchas latinas merecían desde hace tiempo.
La vida antes de J-Lo
Con 46 años, un cuerpo que muchas veinteañeras quisieran, una carrera de cantante, actriz y, empresaria consolidadada, además de fama a nivel mundial, Jennifer pareciera tenerlo todo. Sin embargo, el reconocimiento y el dinero no siempre abundaron, ya que su vida partió de manera mucho más sencilla. Hija de padres puertorriqueños Jennifer Lynn López se crió en el Bronx, un distrito de Nueva York que es conocido por su diversidad cultural, pero también por tener fama de ser algo peligroso y foco de delincuencia y drogadicción. Pero como los estigmas y prejucios deben ser derribados, esta latina se encargó de dejar en claro que se siente orgullosa de sus orígenes.
Desde pequeña se sintió atraída por la danza y en 1991 fue seleccionada como parte del equipo de bailarinas de los New Kids On The Block. Posterior a ello, consiguió un trabajo como bailarina estable en el programa "In Living Color" y fue en 1993, después de un breve paso por el equipo de bailarinas de Janet Jackson, que decidió que quería iniciar una carrera como actriz. En 1995 obtuvo su primer rol en la pantalla grande, para la película titulada "My Family" y en 1997 obtuvo el protagónico para interpretar a Selena Quintanilla, la cantante estadounidense de raíces mexicanas que fue asesinada por su representante. El ponerse en los zapatos de Selena, artista latina al igual que ella, la llevó por el camino del reconocimiento. En 1999, con una carrera de actriz consolidada, lanzó su primer disco "On the 6" el cual marcó el inicio de su carrera de cantante.
Una belleza latina
Dueña de un cuerpo de infarto, Jennifer ha dado todo un nuevo significado a la palabra belleza. Con caderas anchas, un trasero prominente y muslos bien torneados, esta mujer ha logrado que las curvas sean reconocidas como parte de la belleza y así ha logrado dar espacio a otras mujeres con esas características, que por mucho tiempo han sido discriminadas o dejadas de lado por el mundo de la moda. Ya habiendo pasado la barrera de los 40, lo cierto es que esta mujer luce despampanante, con una piel morena, cabello castaño y ojos marrones, rasgos típicos de una latina. Gracias a J-Lo, las curvas de las celebrities han pasado de estar escondidas, a ser lucidas con orgullo. Su tan recordado vestido verde, con dos escotes muy pronunciados tanto adelante como atrás, quedaron en la memoria colectiva como parte de la historia del pop.
Jennifer contó que hace algunos años, un manager le había dicho que estaba gorda y que tenía que bajar de peso para ser exitosa. Pero su reacción, en vez de ponerse a llorar y dejar de comer, fue despedirlo y argumentando que: "Fue algo bastante grosero y propio de una mente cerrada. Pensé: “No, esto es lo que soy […] no hay razón alguna para ser alguien más” ¡Punto para J-Lo! por sentirse segura de lo que es y de lo que quiere transmitir con su imagen.
Inteligencia, talento.... y Pieles
Lo más destacable de esta mujer, es que ha sido lo suficientemente inteligente para plantearse metas y cumplirlas una a una y su carrera es fiel reflejo de ello. Actriz, empresaria, bailarina y cantante, J-Lo tuvo el talento y la perseverancia suficiente para concretar todo aquello que en principio partió como un sueño. Además, como una latina en Norteamérica, doble mérito tiene por haber logrado que los "gringos" se pusieran a sus pies. Es una mujer intensa, que no le tiene miedo al amor y prueba de ello son sus 3 matrimonios y los guapetones que han tenido la suerte de salir con ella, incluido Ben Affleck y con lo regia que es, ha tenido parejas bastante menores que ella.
Pero no todo el mundo ama a J-Lo. La cantante desde siempre se ha empeñado en vestir abrigos, chaquetas de piel de animales muertos de todas las especies posibles: zorros, chinchillas, no hay animal que se le escape del closet a la cantante. Una moda que está en completa retirada por su increíble crueldad y por la facilidad de imitarla, y que sin embargo celebridades como Rihanna, Kim Kardashian,Lady Gaga, Miley Cirus y otras insisten en perpetuar. Se le ha pedido encarecidamente muchas veces a Jennifer que deje de utilizar pieles y que deje de lucrar con ellas (su marca de ropa también las vende) pero ella a pesar de estar consciente de la manera en que estos animalitos son asesinados no parece importarle, lo cual es una decepción.
De todas formas, su belleza latina es innegable, se mantiene estupenda a sus 46 años, es talentosa y exitosa, sólo esperamos que cambie sus crueles hábitos de vestimenta para que de una vez por todas avancemos hacia un mundo mas amable con nuestros hermanos menores.