Me encanta la francesa Marion Cotillard porque, a pesar de ser bella, tiene cara de mala. Me gusta su acento y la encuentro súper talentosa. Ganadora de un Oscar a la mejor actriz por La Vie en Rose, donde personifica a la famosísima cantante francesa Édith Piaf, es en esta película donde además de derrochar talento, mostró que puede cantar. Con ese mismo talento innato la hemos visto en El origen (Inception), Batman, el Caballero de la noche Asciende (The Dark Knight Rises) o Un buen año (A good year), entre otras, películas en las que le ha tocado interpretar personajes potentes, en los cuales ella parece estar muy cómoda.
No es de extrañarse tampoco cómo es que la casa de modas Dior la tiene en sus filas como rostro desde el 2008, ya que la belleza que posee es evidente, es de aquellas de las que uno adivina que se ponga lo que se ponga se verá bien. Lindas facciones, labios gruesos, ojos verdes y pelo castaño, la Cotillard llegó temprano a la repartición de belleza y talento. La felicitamos por eso y esperamos que la pantalla grande sea sabia con ella y no la desperdicie.