Siempre me ha gustado la línea Palmolive y la promesa de sus jabones de no sólo ser limpiadores, sino también brindar los exquisitos beneficios de la aromaterapia. Por eso, este verano me sentí tentada a disfrutar de sus bondades y adquirir el jabón líquido corporal de leche y miel. ¡Una delicia!
Lo primero que destaco de este genial producto es su penetrante aroma, tan suave, dulce y delicioso que resulta un agasajo para los sentidos. Su textura aterciopelada hace que la aplicación sea ¡toda una experiencia! Asemeja a las cremas bajo la ducha, de Nivea, tanto en las sensaciones que provoca como en los resultados: una piel visiblemente humectada, tersa y agradable al tacto. Este jabón es muy distinto a sus símiles en el mercado. ¡Marca la diferencia con ventaja!
Los jabones Palmolive los puedes encontrar en presentaciones líquida y en barra, con aromas tan irresistibles como lavanda y crema (suavidad relajante), oliva y aloe (sensación humectante), granada (intensa renovación), coco y algodón (suave exfoliación), avena y azúcar morena (exfoliación diaria), manzanilla y vitamina E (balanceado y suave), yoghurt y frutas (suavidad radiante) y yoghurt y jalea real (deliciosa nutrición), entre otros. Elige el que más te atraiga y ¡ve por él!
¿Te animas a despertar tus sentidos con esta experiencia?
Imagen CC Karin and the camera