Siempre que escucho hablar de sales de baño se me viene a la mente la palabra relajación. Cuando veo que la gente regala estos productos, me imagino una tina con agua caliente y sin ruido que moleste. Es que la relajación es uno de los beneficios que las sales le dan a nuestro cuerpo, pero hay otros más.
Las sales de baño poseen minerales que pueden ayudarnos incluso a curar algunos malestares musculares, dermatológicos y/ reumáticos. Además, son ideales para liberar el estrés. Estos minerales provienen del mar o de fósiles bajo tierra y si son de buena calidad puedes simular un baño termal en tu propia tina, pudiendo combatir dolores articulares.
Algunos de los minerales que podemos encontrar en las sales son el magnesio, calcio, hierro, zinc y cobre, los cuales ayudarán a nuestro cuerpo y organismo a desintoxicarse, ya que nuestros poros se abren y se liberan.
Como nuestros poros se abren, nuestra piel absorbe todas las propiedades de los minerales, lo cual explica que estos baños puedan aliviar dolores y malestares del cuerpo y organismo.
Por otro lado, darse un buen baño con sales minerales significa hacerse un tratamiento de belleza, ya que es ideal para mantener una piel fresca y suave. Esto, gracias a que estos minerales actúan como exfoliantes naturales, eliminando toda aspereza que haya en nuestra piel.
Como ven, las sales de baño no sólo nos ayudarán a relajarnos, sino que incluso pueden aliviar nuestros dolores. Además, si sufres acné o irritaciones en la piel, este exfoliante natural puede ser la solución a tu problema. Todo, sin contar que darse un baño de tina siempre será más reconfortante que una simple ducha.
Imagen CC Jason Jones