Partiré confesando que los productos Veet no son mi “jardín de flores”. No porque sean malos, sino porque hace unos diez años -cuando cometí la torpeza de comenzar a depilarme con sistemas nada ortodoxos, que te hacían crecer el vello más grueso y rápido- me enfrenté a una de las más dolorosas depilaciones con cera de mi vida. Juré no volver a esos métodos.
Lamentablemente, por falta de tiempo para ir donde mi depiladora, debí recurrir a esta crema Veet. Hay variedad para distintos tipos de pieles, incluso, una para ponerte mientras te duchas y el producto no abandonará tus piernas hasta que tú lo decidas. En este review hablaré de la Veet “Suprem´ Essence”.
La puedes encontrar en supermercados o farmacias por un valor aproximado a $3890 y viene con una espátula para su aplicación y retiro. El tubo contiene 90 ml de crema (si eres más bien peluda y de piernas largas quizás será necesario comprar más de una, pues la idea es que el vello quede cubierto completamente) y sirve tanto para los “tallos” como para el cuerpo en general.
Yo sólo la he ocupado en las extremidades inferiores de mi cuerpo y debo decir que, para un apuro, es bastante conveniente. Pero así como el milagro ocurre en menos de cinco minutos, es así de rápido como te vuelve a crecer el pelo y te pica como el demonio. Si lo que buscas son resultados más duraderos, debes recurrir a la cera o el láser.
Otra de las ventajas que tiene esta crema es que actúa en vellos cortos y sus aceites dejan la piel suave. Así que, si al igual que yo andas corta de tiempo o de lucas y te sale algo de última hora, Veet es más recomendable que la “prestolady”.