La ictioterapia es un tratamiento muy usado que ayuda a remover la piel muerta e impurezas de los pies y manos de una forma completamente relajante, también puede realizarse en otras partes del cuerpo pero no es muy frecuente.
El único pez apto para la ictioterapia es el Garra rufa o pez doctor originario de Turquía, Siria, Irak e Irán debido a que no tiene dientes, por lo que no causa dolor, remueve la piel muerta, bacterias y callosidades generando una pequeña presión con su boca redonda, lo que produce un efecto exfoliante natural y una sensación relajante. Otra característica beneficiosa de la succión de los peces es que estimulan puntos de acupuntura, modulando el sistema nervioso para relajar la zona que se esté tratando, disminuir el estrés y mejorar el flujo sanguíneo, también existe evidencia de que la ictioterapia ayuda a disminuir los signos de la psoriasis y el eczema.
Dónde realizar ictioterapia
Los centros de belleza o Spa que ofrecen ictioterapia deben ser muy rigurosos en cuanto al cuidado de los peces y la higiene de los tanques para que el tratamiento sea efectivo, es por esto que las personas con heridas expuestas, sistema inmune debilitado, procesos infeccioso recientes, enfermedades de la piel, diabetes u otra afección contagiosa en la zona a tratar, no pueden tener contacto con los peces.
Las fuentes de agua no tienen cloro ni otro químicos dañinos, se filtra después de cada tratamiento y hay alrededor de 100 peces en cada una para evitar que sean sobrealimentados o que traspasen infecciones entre clientes, aunque esto rara vez ocurre. En ocasiones los Garra rufa son puestos en acuarios para que puedan tener períodos de descanso.
Los precios de este tratamiento varían dependiendo de la duración y servicios adicionales que incluya. Se recomienda que posterior a la exposición de la piel a los Garra rufa se realice una pedicura, por lo que es común que ambos servicios vengan en un pack, y que se espere al menos 24 horas antes de depilarse la zona que haya sido tratada.
Beneficios y efectos de la ictioterapia
Debido a que este proceso no es dañino para los peces o las personas, puede ser realizado cuantas veces sea requerido, sin embargo, la recomendación ideal es una sesión de 30 minutos cada semana. La mayoría de las personas comenta que incluso después de la primera sesión la piel queda mucho más suave y tersa.
Hay que estar alerta sobre la calidad del sitio donde se vaya a realizar el tratamiento, ya que algunos centros de belleza no tienen expertise en qué es la ictioterapia por definición. Los Garra rufa son bastante caros y para disminuir costos compran peces de apariencia similar pero que son incapaces de realizar bien el tratamiento porque tienen dientes, por lo que la piel queda dañada, se sienten molestias y se está mucho más propenso a contraer infecciones, en otros casos, el agua no es filtrada constantemente y las heces de los peces y piel muerta de otros clientes queda estancada en el tanque, también puede ocurrir que los peces sean sobreexplotados, privandolos de una dieta normal para que tengan el hambre suficiente al momento de que lleguen los clientes.
Con sus pro y sus contra la ictioterapia es un procedimiento que si se realiza con todas las medidas de seguridad es extremadamente beneficioso para la piel y la salud en general, por sus beneficios adicionales y la divertida sensación de tener muchísimos pececitos nadando por tu cuerpo.