La depilación siempre es un acontecimiento importante indiferentemente de si se realiza con máquina de rasurar o cera, hay que tomar en cuenta que pueden ocurrir problemas indeseados como pequeños cortes, quemaduras, inflamaciones, alergias o aparición de granitos, por lo que se debe planificar la depilación si se quieren prevenir estos problemas para a una ocasión importante, tampoco se puede hacer forma apurada o muy al ras porque existen malestares posteriores propios de la depilación que pueden llegar a ser realmente incómodos y entre ellos está la picazón que toda persona ha tenido que experimentar al menos una vez en su vida. Para depilarse y que no pique existe una serie de 5 pasos simples que siempre me ha resultado y que además ayuda a mantener la piel suave.
1. Primera exfoliación
Este paso para depilarse y que no pique es primordial, ya que la piel acumula impurezas en sus poros y si no se eliminan el contacto con la cera o máquina de rasurar pueden causar una inflamación, lo que se traduce en la aparición de esos molestos granitos rojos que arden y pican. Es muy importante que la exfoliación sea con la piel húmeda pero fría, lo que significa que debe evitarse a toda costa realizar la exfoliación durante el baño porque la piel está más sensible y podría terminar sufriendo consecuencias por los micro rasguños que causa la parte sólida del exfoliante.
2. Aplicación de crema o gel para rasurar femenino
La función de este producto es abrir los poros y contribuir a que la remoción de vello sea más fácil. La forma correcta de aplicarlo es de modo circular con un cepillo de cerdas finas para que ingrese en la piel pero no de forma brusca.
3. Depilación
Es el protocolo común que la depilación sea en secciones grandes y en la dirección contraria al vello, sin embargo, este es un error ya que los vellos crecen más gruesos y se puede llegar a lastimar la piel, causando una fuerte picazón e irritación. La forma correcta para depilarse y que no pique es utilizar la máquina de rasurar o la cera, es depilando pequeñas zonas y siguiendo la dirección del vello, de esta forma no maltratamos la piel o los poros y además se debilita el vello.
4. Segunda exfoliación
El objetivo de esta segunda exfoliación es eliminar los restos de crema y vellos que fueron cortados pero quedaron entre las capas de piel, esto evitará que crezcan vellos encarnados, salgan granitos, y se produzcan irritaciones. Puedes utilizar un exfoliante más suave en este segundo paso para que no maltrates demasiado tus poros.
5. Aplicación de crema hidratante
Este último paso es para evitar la resequedad de la piel, que es es un factor importante si se busca depilarse y que no pique. El detalle que no se puede dejar de lado es que la crema debe necesariamente ser hidratante, ya que tendremos los poros levemente abiertos e irritados y si aplicamos cremas de textura más oleosa como las humectantes, podríamos dejar restos dentro de los poros y causar inflamaciones indeseadas de los poros.
Atrévete a probar esta rutina, solo debes tomar en cuenta que si tu piel es sensible tienes que dejar una brecha de al menos 4 días entre cada depilación. Podrás ver los resultados de inmediato y por fin evitarás de esa molesta picazón.