No caben dudas que las uñas forman parte importante de la presentación personal. Aunque estén limpias, unas uñas mordidas y deterioradas generan un aspecto desaseado. A continuación te entregamos 5 tips que te ayudarán a "recuperar" tus uñas cuando están débiles,
1. Sumergir un pedazo de ajo en el esmalte
Más que un pedazo entero, cortas la cuarta parte de un diente de ajo, lo picas en trozos muy pequeños y lo sumerges en un esmalte (de color o trasparente). El ajo cuenta con grandes propiedades curativas y está compuesto por distintas proteínas como Calcio, Vitamina C, Vitamina B6, Hierro; etc. Las que nutren y reparan las células en tus uñas.
Pinta tus uñas con ese esmalte por un mes -al menos- y verás los resultados.
2. "Enterrar" tus uñas en una cebolla una vez a la semana
Al igual que con el ajo, la cebolla posee nutrientes esenciales para regenerar tejidos. Debido al olor de esta planta, es recomendables que lo realices en tu hogar, en algún momento que no implique compromisos posteriores con otras personas.
Debes "enterrar" las uñas en la mitad de una cebolla, al menos por una hora a la semana.
3. Consumir alimentos altos en Hierro y Vitamina c
Todo lo que consumes tiene repercusiones en tu cuerpo. Es por lo mismo que si comes alimentos ricos en hierro (Cereales integrales, yema de huevo, legumbres, verduras con hojas verde oscuro -espinacas y acelgas-, frutos seco y frutas como uva y mango) estos beneficiarán todo tu cuerpo y uñas. Además de consumir comidas con Vitamina C como naranja, limón, pimiento; etc, también contribuyen.
4. Limarlas en vez de cortarlas
Lo has escuchado mil veces pero nunca puesto en práctica: lima tus uñas y no las cortes. Cuando cortas tus uñas ejerces una presión sobre ellas que crea pequeños quiebres en ella, los que originan posteriores roturas de mayor magnitud.
5. Evitar humedad
La humedad es uno de los mayores responsables de debilitar las uñas. Ya sea porque te llevas la mano a la boca -¡lo peor!- o lavas la loza reiteradas veces, exponerlas a tanta agua terminará por dejar tus uñas flácidas. Además de dejar de comértelas y empezar a lavar los trastos con guantes, no olvides secar muy bien tus manos después de cada lavado para que la humedad no quede entre tus uñas y las debilite o provoque hongos.