Ser mujer sin duda es algo divino. No es una afirmación súper feminista "porque sí", sino porque de verdad tenemos un montón de cosas que a mí me encantan. Más allá del maquillaje, perfumes, ropa, accesorios -que en realidad no tienen género- desde la forma de nuestros cuerpos hasta la forma como pensamos -por complicado que parezca- me confirman que ser chica es un éxito. Todo esto me parece así de divertido por unos días del mes. Porque hay otros, que de verdad no son un paseo en el parque.
Y es que si bien todo lo que implica ser mujer puede ser buenísimo, las hormonas de verdad que son algo impresionante cuando quieren molestarnos. Y entre los días previos a cuando tenemos la menstruación, para muchas no hay sentimiento feminista que valga. Es un fastidio y sólo quien lo sufra lo puede afirmar.
Los días previos, o síndrome pre menstrual (SPM), ocurre unos 11 días antes de la menstruación y aunque las razones como tal no están completamente definidas, se piensa que es por la acción de las hormonas durante esa época del mes, sobretodo en aumento de estrógenos y progesterona. Entre los síntomas más comunes encontramos dolor e hinchazón en las bubies, brotes de acné, cansancio, ansiedad, te sientes más sensible emocionalmente, y sobre todo sientes antojos de dulces. Y como si esto no fuese poco, también sufrimos de hinchazón y dolor abdominal (¡yeeeiiii!)
Pero antes que te eches al sofá a llorar mientras te comes un pote de helado, espérate un poquito, no todo está perdido. Hay mucho que puedes hacer para que el SPM no arruine tu dieta, ni tu cintura (ni tu relación con tu pololo):
-Hay comidas que te van a ayudar a pelear al SPM, y según WomensHealth el brócoli, las alcachofas y los repollitos de Bruselas están de primero en la lista. Esto, porque están cargados de fibra, y si bien muchas piensan que las puede "hinchar" porque le producen gases, estas comidas en realidad ayudan a que se muevan mejor las cosas en tus intestinos y no te sientas tan hinchada.
-Aléjate de la comida muy salada. Quizás te provoca una bolsa de chips entera, pero recuerda que la retención de sodio es tu enemiga cuando hablamos de sentirte inflamada. Si quieres algo con sensación crunch o crocante pues toma unos palitos de apio o zanahoria, unas gotas de limón y un poco de pimienta para el sabor. Sí, sabemos que no saben a papas fritas, pero piensa en tu barriga y no sólo en el sabor.
-Come yogurt bajo en grasas. Hay estudios que relacionan el consumo de calcio y vitamina D con la mejora en los síntomas del síndrome pre menstrual. Según WebMD las chicas que consumieron yogurt bajo en grasas tenían un 40% menos de padecer los síntomas del SPM. Y aquí en Chile yogures en el mercado es lo que sobra. Les recomiendo los que sean griegos y light, o de soya para los veganos (que también son light). Le das un poquito más de proteína a tu dieta y te salvas un montón de calorías.
-Sé fuerte como Popeye. Comer espinacas también te puede ayudar a manejar los cambios de humor, la tensión en tus senos y la inflamación. Según Self.com, este vegetal ayuda a bloquear los neurotransmisores en tu cerebro que aumentan algunas hormonas malvadas. Una magnífica manera de incluir este vegetal en tu dieta es con un batido verde que además te ayudará a sentirte súper desinflamada.
-Muévete un poco. Quizás dirás "ni en tu sueños", pero la verdad es que un poco de ejercicio puede ayudarte a mejorar los síntomas del síndrome pre menstrual. Según womenshealth.gov, hacer dos horas y media de actividad física moderada y una hora y 15 minutos de actividad intensa a la semana (no cada día) puede ayudarte a aliviar los malestares. Quizás lo ves como difícil, porque relacionas estos días con baja energía, pero la verdad es que el mismo ejercicio te mejorará fuerza y ánimo en el día.
-Toma manzanilla: Esta infusión es perfecta para después de comer en cualquier momento de la vida pero durante estos días es aún más exitosa. Ayuda a relajarte, lo que hace que baje tu ansiedad por comerte todo y querer matar al mundo, y además ayuda mucho si sientes calambres en el vientre.
Y cuando todo falle, pues siempre existe el chocolate. No te estoy diciendo que te bañes en él, pero consentirte un poquito no es el fin del mundo, y de hecho puedes hacerlo de la manera correcta. Esto es escogiendo un chocolate oscuro que tenga más del 72% de cacao,. Este tipo de chocolate es más nutritivo, es una buena fuente de antioxidantes, mejora tu presión sanguínea y hasta protege tu corazón. Todo esto, mientras te comes un postre y dejas el sufrimiento atrás. ¡No te puedes quejar!