Tratamientos que por ningún motivo debes hacerte antes de tu boda

No hay mujer que diga "a mí no me importa cómo me vea el día de mi boda". Hasta las menos románticas desean verse lo mejor que puedan en ese día de su vida. Y si, por eso muchas buscamos cualquier tratamiento de belleza que nos ayude a vernos de mil puntos en esa celebración.

Lo que pasa es que debemos estar pendientes y no dejar que la emoción haga que tomemos decisiones apresuradas. Hay tratamientos de belleza que si bien puedes probar en cualquier momento de tu vida, los días antes de tu boda deberías poner en espera. Porque además de cómo te vean los invitados (así sea sólo tu mamá, tu mejor amiga y tu primo de 11 años) seguramente tomarás fotos donde debes verte de lo mejor. Y hay tratamientos que si bien realzan tu belleza, pueden jugarte en contra para esos días. Si no los has probado antes, no esperes a experimentar justo ahora, cuando te pueden jugar una mala pasada:

-Bronceados artificiales: a menos que ya seas una maestra en el arte del bronceado, lo mejor es alejarte de estas técnicas las semanas antes de tu boda. Puedes quedar con un color súper artificial, anaranjado o marrón marciano y no con la piel dorada que siempre has deseado. Y lo peor es que estos bronceados artificiales no se van inmediatamente por lo que la planificación con tiempo es indispensable. Si quieres darle un toquecito de color a tu piel, prueba -con varios días antes- alguna crema autobronceadora, con brillo y tono.

-Tratamientos faciales fuertes: cualquier tratamiento muy abrasivo para la cara puede traerte consecuencias indeseadas. Los peeling químicos tienen que estar en tu lista de los NO NO antes de la boda. Te pueden dejar con marcas en la cara que ni el mejor maquillaje pueda disimular. Si eres de piel muy sensible, limpiezas profundas o scrubs fuertes también tienes que dejarlos, por lo menos los días cercanos al evento. ¿Te imaginas con la cara roja y no de la emoción dando el sí?

-Depilación del bigote con cera o crema depilatoria: ok, si, muchas mujeres tienen bigote y la depilación con cera o con crema depilatoria son una maravilla para muchas. Pero si dejas este tratamiento para los días cercanos a la boda puedes tener consecuencias indeseables. Muchas chicas generan granos, irritación y marcas en un lugar donde es imposible disimular lo que pasó. Lo mejor es hacerlo unas semanas antes del magno evento, o hacerlo con tu técnica de siempre, aquella que no te produce mayor irritación y que ya has probado. Ah y por tu comodidad, tampoco te depiles "downunder" muy encima de la fecha. Quizás tu sueño es lucir la depilación brasilera para el día de tu boda (bueno, sobre todo para después) pero recuerda que esta puede ser súper dolorosa, te puede causar irritación y hasta picazón. No es el mejor combo para esa noche.

-Tintes / Cortes de cabello radicales/depilación de cejas: bueno, cada quien con su estilo pero si ya tienes un look pensando para el día de tu boda, mejor dejar la cabeza quieta literalmente. Es decir, tienes toda tu vida por delante para probar lo que desees, desde el pelo azul a tener la cabeza rapada. Y probar que tal se te ve el look de cejas "hilo" los días antes, te puede dejar en crisis. A no ser que el color radical sea parte de lo que quieres transmitir ese día, mejor que los experimentos los dejes para después. No te preocupes que el novio no se asustará con eso, el matrimonio tiene un montón de otras cosas más escalofriantes que un corte de cabello radical.

Un último tip: no hagas cambios radicales en tu dieta ni comas mucho sodio. Esto no es un consejo para que te obsesiones sólo con la talla de tu vestido, pero si para que pienses en tu comodidad. Esa última semana estarás como loca con los detalles finales. Seguro descuidarás tu alimentación. Pero ponerte a inventar mucho con lo que comes en la calle puede terminar en un desastre en el baño. Y si hablamos del departamento de belleza, si comes demasiada comida alta en sodio, pues eso se verá en tus manos, en tus pies -que ya estarán aguantando zapatos que al poco tiempo te parecerán incómodos, tan bellos que eran- y hasta la cara se puede hinchar un poco. Mejor come sanito, lo más casero que puedas y dejas los inventos culinarios para la luna de miel.