Durante el invierno nuestros pies permanecen protegidos del sol, la tierra, y la resequedad en general, porque usamos zapatos cerrados y calcetines. Durante los meses fríos nuestras "patitas" se recuperan de todo el daño del verano anterior, pero una vez que comienza a hacer calor y empezamos nuevamente a optar por un calzado más abierto, comienza a descascararse el talón, entre otras cosas. Además de ponerle atención al talón, debemos preocuparnos de otros detalles si queremos lucir unos pies hermosos.
- Humectarse a diario: los pies se resecan muy fácilmente, especialmente si usamos sandalias de taco bajo, ya que el talón, dedos etc. reciben el polvo del suelo y esto los reseca y resquebraja. Cada mañana después de la ducha debiéramos aplicar una buena crema hidratante antes de ponernos nuestros zapatos.
- Usar piedra pómez en la ducha: cuando nos duchamos a veces no ponemos mucha atención a los pies, pero como decíamos, estos están casi en contacto directo con la tierra y polvo del suelo, y esta se va pegando a los pies durante el día, por lo que es importante sacarse a diario esta tierra con un jabón humectante y una piedra pómez.
- Uñas impecables: prestemos especial atencion a las uñas de nuestros pies, que personalmente prefiero llevar siempre cortitas y pintadas con un esmalte de uñas transparente o rosado pálido, que hacen ver muy lindos los pies, especialmente si tus uñas no son muy bonitas. Si te gustan los esmaltes de colores más fuertes, también es una buena opción, pero recuerda que se verá mejor si el color de tu esmalte combina con el de tus sandalias.
- Lleva una crema en tu cartera: así puedes aplicar crema en tus pies durante el día en algún momento y de esta forma mantendrás tus pies más hidratados.
- No olvides el protector solar: una zona olvidada de nuestro cuerpo en términos de protección solar son los pies. Pero estos también están expuestos a la radiación solar, así es que no olvides aplicarte un bloqueador especialmente en el empeine y dedos.
- Ojo con los juanetes: si en tu familia tienes historial de juanetes (y si no, también) evita los zapatos demasiado cerrados en la punta, zapatos demasiado angostos, así como aquellos con el taco muy alto, este tipo de calzado ayuda a formar los indeseados juanetes, que ademas de antiestéticos, son dolorosos. Si ya tienes juanetes, ¡no desesperes! Hay productos hechos de silicona que ayudan a corregir este problema, la idea es detectarlo a tiempo.
- Regalonea tus pies: Al menos una vez por semana pon tus pies en agua tibia con jabón suave, déjalos unos 15 minutos, luego elimina toda la piel muerta de los talones y otras partes con una escofina, y aprovecha de hacerte la pedicure y aplicar una buena crema. Para aun mejores resultados, puedes aplicarte vaselina o crema en los pies y dormir con calcetines gruesos. En verano puede resultar desagradable, pero piensa que valdrá la pena hacerlo de vez en cuando, ya que cuando despiertes tus pies estarán suaves y listos para lucirse.