Siempre estamos buscando nuevos alimentos para incorporar en nuestra dieta. De aquellos que beneficien nuestra piel, nuestro organismo y que ojalá sean un complemento para lograr bajar esos kilitos de más. Las bayas de goji son el alimento del momento. Yo las probé y desde mi experiencia te contaré los beneficios, cuánto comer y cómo comerlas
Beneficios
Si hay algún alimento que combina muchos beneficios, ese es el goji. Es antioxidante. Ayuda a disminuir la celulitis, ya que contiene beta-sitosterol, un elemento que actua como un desinflamatorio. También protege la piel y por su alto contenido en carotenos, polifenoles, polisacáridos y oligoelementos es capaz de retrasar el envejecimiento. Por lo tanto, ayuda a disminuir las arrugas.
El riñón y el hígado también se ven beneficiados al consumir este elemento, ya que el goji los cuida y los mantiene en buen funcionamiento. Ayuda a reducir el peso, ya que acelera el proceso de quemar grasas. Lo más importante, ayuda a combatir el sueño y el cansacio.
Una contraindicación es que si sufres de alergia al polen, deberías evitar consumirlo, ya que podría producir alguna reacción desfavorable en tu cuerpo. El fruto suele tener cercanía con las flores.
¿Cómo consumir goji?
Primero debes saber que el goji debes consumirlo antes de cada comida, unas 4 veces al día y una cantidad de 12 o 13 frutos por comida.
Yo lo tomaba como un jugo. Todas las noches dejaba el goji remojando en agua. A la mañana siguiente me tomaba un jugo mezclado con kiwi y frutilla, por ejemplo. Ahí puedes ir variando la fruta para no aburrirte.
También puedes consumirlo como frutos secos, ahí dependerá de si te gusta el sabor del goji solo. Normalmente sabe amargo, por lo que es recomdable acompañarlo con otros frutos secos.
También existe la opción de las cápsulas. Las venden en las farmacias, son productos naturales del extracto de las bayas.
Los 100 gramos de goji los puedes encontrar a $2.700 en cualquiera de las tiendas que vende frutos secos, quinoa, chía, etc.
Si vas a consumir goji hay que ser constante. No esperes ver resultados en un mes. Lo ideal es incorporarlo en las comidas constantemente y hacerte un hábito. Yo lo comí durante 3 meses y noté diferencias en mi piel. Me sentía con mucha más energía en las mañanas.
¡Dale un intento y escríbenos para saber cómo te fue!