Hace poco vimos las declaraciones de Kate Winslet que pedía no se retocaran sus fotos para borrar arrugas y "exceso de volumen", pues bien ahora es Drew Barrymore quien arremete en contra de los estereotipos de Hollywood, asegurando que no le importa no tener un “cuerpo de bikini”.
La ex ángel de Charlie, con 40 años y dos hijas a cuestas, no da mayor importancia a lo que se espera de ella por ser una actriz famosa, al contrario, declara estar consciente que no tiene lo que se denomina comúnmente como “cuerpo de bikini”, asegurando (según sus propias palabras) que ni siquiera tiene cuerpo para usar traje de baño, pero que eso no le importa. Muy valiente de su parte, teniendo en cuenta las terribles presiones del medio para que las mujeres sean delgadas, incluso inmediatamente después de tener hijos, cosa impensada para una mujer común. Ella escapa de la norma, y entiende que a los 40 no se puede pretender seguir teniendo el cuerpo de una mujer de 19, al menos no sin sufrir su buen poco. Ella no está dispuesta a vivir a dieta y pasar en el gimnasio, quiere comer rico y estar con sus hijas, aceptando el paso del tiempo. Pero con su belleza, talento e innegable simpatía, no necesita más. La gente la sigue adorando, y con esto quizá la queramos incluso un poquito más.