Debo reconocer que hay días en los que despierto con la idea de que mi maquillaje de diario es muy monótono, y a veces siento la necesidad de hacer algo. Da la casualidad de que solo un producto puede marcar la diferencia y es una perfecta solución para el "problema" (al menos en mi caso) los labiales. La última vez que me sentí así, compré un Lipglossy de la línea Easyshine, un brillo labial llamado Watermelon Juice número 7, de Jordana. Esta marca es de buena calidad y muy económica, su precio es de $1.490, los puedes encontrar en las tiendas Make Up y Preunic. Lo mejor es que no testean en animales ¡Es una de las marcas en las que puedes confiar!
Mi experiencia con el Lipglossy es media, ya que tiene cosas buenas y malas, pero quise darle una oportunidad ¿Por qué? Su olor es maravilloso, como indica su nombre, este es de Sandía (Watermelon), aunque si se aplica en exceso, su olor puede llegar a ser molesto. Su color es un rosado claro, y su tono depende mucho de la cantidad usada. Aconsejo ir probando la aplicación para encontrar un look bonito y único. No es muy cremoso, por lo que es fácil de esparcir y eso ayuda en su aplicación. Tiene una barra mediana en su largo y fina, de 2 gramos ¿Lo malo? Se corre y mancha la piel cerca de la boca ¡Hay que tener cuidado con eso!
La línea Easyshine cuenta con una gama de 12 colores (cada uno junto a su respectivo olor) y todos estos puedes encontrarlos disponibles en las tiendas mencionadas. Sinceramente el Lipglossy cumplió con las expectativas que había puesto por el precio que tiene, a diferencia de muchos otros labiales que hay en el mercado. Lo recomiendo para usarlo en salidas cortas o en una que otra emergencia, ideal para llevarlo en la cartera.