Nos hayamos atrevido o no, todas hemos querido tener el pelo de algún color del arcoíris alguna vez: mechas azules, amarillas, moradas, verdes y otros colores poco convencionales. Quizás ya conocerás algunas tinturas de colores que circulan por internet o los salones, sin embargo existe una opción económica, fácil y efectiva para colorear tu cabellera: si sigues cada paso con paciencia y dedicación, te aseguro que lograrás una tinturación espléndida.
Cabe señalar que el siguiente tutorial puede ser aplicado desde una pequeña "mechita" hasta la cabellera completa. Los materiales variarán según tu cantidad de cabello además de lo grueso y oscuro que sea este, y el color que desees lograr. Las fotografías de portada fueron resultados de mis tinturaciones del año pasado con este mismo procedimiento (para que tengas una idea).
Materiales:
- Anilina: La puedes conseguir en cualquier ferretería que vendan pinturas. Sí, tal como leíste: esta anilina es la misma con la que se tiñe madera, no tiene relación con la usada para tinturar ropa. No debería costarte más de $300 y con un pequeño sobre basta (se requiere una porción muy mínima para teñir). Según la ferretería que compres, variará la paleta de colores. Si quieres más de un color, compra más de un sobre. Insisto: con un poco de anilina basta, no es necesario que adquieras una bolsa gigante.
- Decolorante: Puedes conseguirlo en la farmacia. Un sobre de decolorante alcanza para una cabellera corta (altura de los hombros) y no muy densa (poco cabello a normal). Respecto al activante, dependerá totalmente de tu cabello. Para seleccionarlo lee el paso de decoloración más abajo.
- Acondicionador: El acondicionador o bálsamo es importante para mezclar la anilina. No importa la marca, sólo fíjate que el color del producto sea totalmente blanco y no amarillo o cualquier otro tono.
- Implementos de tinturación: Necesitas un recipiente para realizar las mezclas (puedes usar un envase vacío de una crema para el cabello), ropa vieja (para no manchar o decolorar la nueva), cepillos para esparcir los productos en el cabello, pinzas (para separarlo), guantes (muy importante) y toallas. Tampoco olvides tener a mano tu shampoo y secador de pelo.
Instrucciones:
1. Decolorar
Si tu cabello no es de un rubio claro, debes decolorarlo. Es importante seleccionar el activante del decolorante y el tiempo de decoloración respecto al color que quieres obtener (además de tu tipo de cabello). En caso de un verde, azul o morado o cualquier color en su versión más fuerte (ejemplo en las imágenes de portada), no es necesario que decolores demasiado la zona. Si quieres lograr un color crema o tonos muy claros y con poca fuerza, es importante que lleves una decoloración a fondo.
Para cabello grueso, teñido o muy oscuro, recomendaría usar un decolorante número 30 (a menos que te arriesgues a usar un 50 que es muy fuerte). Si nunca te has teñido déjalo no más de media hora. Si ya está tinturado puedes esperar 40 minutos o un poco más.
En caso de usar uno de 50, recomiendo no dejarlo más de 20 minutos o media hora en caso de querer alcanzar el tono más rápido. Si tienes el cabello muy delgado o dañado, usar un número 20 y por media hora como máximo. Si dejas más tiempo de lo indicado el decolorante en tu cabeza, se te caerá más pelo de lo habitual -es normal perder un poco- y te arriesgas a quemarlo.
En todos los casos -a menos que tengas un tono claro natural- te quedará un amarillo anaranjado. Es parte del proceso. El shampoo te ayudará a eliminar ese tono oxidado.
No olvides probar un poco de decolorante en tu piel antes de aplicarlo, para prever alergias o reacciones de la piel. Tampoco está de más recordar que utilices ropa vieja para el proceso, ya que el decolorante también destiñe las telas.
2. Lavar y secar
Después de decolorar es importante lavar muy bien el cabello y secarlo. Cuida que no queden residuos ni humedad.
3. Preparar anilina
En un recipiente debes mezclar la anilina con el acondicionador, debes revolverlos hasta logar una mezcla homogénea. La tintura que te resulte luego de juntar ambos productos, puedes guardarla hasta por 12 horas (no perderá calidad ni consistencia antes de eso, así que tómalo con calma). En este punto es importante que tengas en cuenta las proporciones de pintura y cabello para saber la cantidad que debes usar.
Por cada 10 ml de acondicionador (un sachet) debes aplicar una "pizca" de anilina. Y cuando digo "pizca" me refiero a la pequeña porción que alcanzas a sostener entre tu dedo índice y pulgar. Si superas esta cantidad, te quedará una tintura demasiado concentrada y mancharás todo a tu al rededor cada vez que te laves el cabello.
Cabe señalar que mientras menos anilina utilices, el color quedará más suave y con tonos más pasteles (incluso puedes usar un par de "granitos"). Sin embargo, no puedes superar la cantidad indicada: con eso basta para lograr un color fuerte.
Respecto a las proporciones en base al cabello, depende de la cantidad y largo de este. Un cabello corto hasta los hombros, que no sea muy abundante, necesitará 60 ml aproximadamente, uno muy abundante y largo, puede llegar a necesitar más de 100 ml (la mitad de un vaso). En relación a esto, recomiendo preparar
En este caso, usaremos de referencia un delgado mechón de cabello. Para tinturar esta cantidad no necesitamos más de 5 ml de acondicionador y un par de "granitos" de anilina.
4. Tinturación
Antes de comenzar, si tienes mucho cabello, recomiendo separarlo por partes. Luego que mezclaste muy bien la anilina con el acondicionador de manera que no quede ningún grumo, recién puedes empezar a tinturar. Aquí usaremos una muestra de cabello, como se ve el pelo a teñir debe quedar completamente decolorado para que tome el color deseado.
En esta parte debes pasar el peine para tinturar por cada mechón de cabello, si vez que el color no toma o está muy claro, puedes volver a aplicar una "pizca" de anilina a tu mezcla y revolverla nuevamente. Si está muy concentrado el color, agrega acondicionador a la mezcla.
a) En caso de querer aplicar más de un color, sólo tiñe la zona que quieres tinturar del tono que estás aplicando y aparta el cabello que teñirás de otro color (ten cuidado de no pasarlo a llevar con los implementos).
b) En caso de querer obtener un degrado de colores (como la segunda fotografía en la portada) empieza con una mezcla fuerte en la zona que quieres más oscura y aplica acondicionador en el recipiente para aclarar a medida que vayas avanzando.
No te preocupes si "pasas" a teñir cabello que no está decolorado. Normalmente, la anilina sólo funciona cuando el cabello es muy claro o está decolorado.
Deja reposar la tintura en tu cabellera (ojalá con una bolsa envolviendo la cabeza) por 30 minutos. No es necesario dejarla más tiempo, con media hora basta y sobra.
5. Lavar y secar
Esta vez lava sin shampoo. Con el acondicionador que llevas mezclado con la tintura bastará para suavizarlo. Sin embargo, debes lavarlo hasta que el agua deje de caer con demasiado color o simplemente caiga de color trasparente.
Toma en cuenta que la toalla que uses quedará manchada del color de la anilina. Selecciona una exclusiva para este uso. Nunca recomiendo el uso del secador sobre el cabello decolorado, lo mejor que puedes hacer es dejarlo secar al natural.
Cuidados
1. Lo ideal, es dejar de usar shampoo. Este producto suele disminuir la potencia de la anilina en poco tiempo (al segundo lavado ya estarás desteñida). Si no puedes eliminarlo por completo, dedica sólo una vez a la semana el lavado con shampoo. El resto de los días, sólo aplica bálsamo.
2. Evitar secador: Tal como mencioné anteriormente, intenta evitar el secador todo lo que puedas. Muchas veces la plancha es necesaria, así que reserva esa exposición de calor al proceso de alisado.
3. Tinturar nuevamente: Puedes repetir el proceso de coloración cuantas veces quieras. Sin embargo, intenta hacerlo cuando el color pierda fuerza y personalidad. Respecto a la decoloración, en caso de tener raíces, aplícala exclusivamente en la zona virgen del cabello y no sobre el que ya está decolorado. Este proceso es muy dañino para el cabello y puedes experimentar una gran pérdida de pelo si abusas de él.
4. Cremas para proteger el cabello: Al igual que en cualquier decoloración, te recomiendo utilizar cremas para proteger el cabello. Sin embargo, debes usar porciones muy pequeñas si eliminaste el uso de shampoo, puesto que el cabello puede quedar muy graso o fomentar la aparición de caspa.
Espero les haya gustado y se animen a probar con un mechón (o con la melena completa). No tengan miedo a innovar, todo lo referente a cabellera es reversible con el tiempo.