​Máscara facial casera de frutillas y miel para el acné

Cualquiera que haya experimentado un brote de acné sabe que no quiere irritarla más de lo que ya está. Es por esto, creo, que muchas mujeres y hombres que tienen piel proclive al acné están optando por productos orgánicos y remedios caseros para atenuar o eliminar el problema. La máscara de frutilla y miel puede encontrarse en la web en muchas versiones, la nuestra también lleva limón, que es lo que pensamos marca la diferencia. Las instrucciones son simples, y sólo requiere de 3 ingredientes y el tiempo necesario para hacer la máscara de principio a fin es de sólo 5 minutos.

Necesitas: 5 frutillas frescas, sin tallo; una cucharada de miel orgánica y ¼ de limón fresco (rodaja)

Beneficios de los ingredientes: la frutilla es una fuente natural de ácido salicílico, el cual es un ingrediente bastante usando en los tratamientos anti-acné, porque limpia los poros y elimina los puntos negros sin resecar la piel. También se utiliza como un exfoliante natural. La miel por su parte posee propiedades antibacteriales, que benefician las pieles propensas al acné al reducir la frecuencia de los brotes y curar las espinillas que ya hayan aparecido. Además es un humectante natural, por lo que captura la humedad necesaria para mantener la piel hidratada y suave. El limón es un astringente natural que aprieta los poros e ilumina la complexión (porque los limones están llenos de vitamina C y antioxidantes). Es también un ingrediente comúnmente usado para emparejar el tono de la piel, y bueno para minimizar las cicatrices del acné.

Instrucciones: cortar las frutillas en rodajas delgadas y ponerlas en un plato. Con un tenedor, molerlas para extraer el jugo. Hazlo hasta que las frutillas estén bien molidas. Hecha la pulpa de frutilla en un bowl, agrega el jugo del limón y la cucharada de miel, y revuelve hasta incorporar bien los ingredientes. Si te queda muy aguada la mezcla, échale más miel, y viceversa, hasta lograr una consistencia adecuada.

Cómo usar

Es preferible usar esta máscara inmediatamente una vez lista, ya que los ingredientes son más potentes, así aprovechas al máximo sus beneficios. Puedes refrigerarlo durante 10 minutos antes de aplicar para que la máscara esté fría, o usar directamente del bowl. Dejar en la piel por 7-12 minutos. Enjuagar con agua tibia.

Si te quedaron restos de frutillas, muélelas y moja una bolita de algodón en el jugo. Aplica dos veces al día en toda la cara a modo de tonificante. Guarda este tonificante casero de frutillas en el refrigerador (completo, con pulpa y semillas) por hasta 5 días.

Vía: BeautyBanter