El cuello es, a juicio de muchos hombres, una de las zonas erógenas más atractivas de nuestro cuerpo. Sin embargo, es curioso que le prestemos tan poca atención: usualmente nos preocupamos de aplicar cremas y tratamientos a manos o rostro, olvidándonos de él. ¡Y vaya que requiere de cuidados!, ya que su piel es mucho más fina y elástica, además de verse expuesta a diversas agresiones, como la aplicación de perfumes o el afeitado (en el caso de los hombres).
¿Sabías que un cuello mal cuidado puede hacerte ver de más edad? Así es: si no lo crees fíjate en mujeres que lo tienen agrietado y te darás cuenta de cómo lucen envejecidas. Con los años, esta zona se torna flácida y reseca, lo que termina por ir en desmedro del aspecto general. Entonces, no sacarás mucho teniendo el mejor maquillaje o un rostro terso: siempre este “detalle” arruinará el look total.
Alejandra Ríos, dermatóloga y directora médica de Central Klinic, señala que ya a los 30 años deberíamos iniciar una rutina de cuidados, que incluya el uso de hidratantes y protectores solares. Lo ideal es evitar que se exponga a agentes contaminantes - como el humo del cigarro - junto con ejercitar la zona para impedir que se suelte la piel. También es menester llevar una dieta saludable y abundante en agua.
A medida que vamos cumpliendo años, la doctora recomienda que antes de aplicar la crema hidratante, utilicemos un suero con ácido hialurónico y péptidos específicos, además de principios activos como la vitamina E y células madres vegetales. Así, aumentaremos la renovación celular y evitaremos la aparición de manchas. Una excelente alternativa disponible en el mercado es la Triple Firming Neck Cream, de Neostrata, que no sólo es reafirmante, sino que también ejerce un efecto lifting, suavizando y rejuveneciendo las líneas del contorno. Esta joya cosmética no se queda en eso, ya que también incrementa la producción de colágeno y ácido hialurónico desde adentro hacia afuera.
Ahora, si este artículo llegó tarde ante tus ojos y ya has notado que tu cuello no es el de antes, la especialista recomienda tratamientos específicos para mayor rapidez y eficacia. Por ejemplo: el micro lifting con láser o el Erbium Yag, que generando un profundo depósito térmico en la piel, contrae el tejido generando colagenogénesis y un efecto inmediato de tensado. La recuperación es casi instantánea (de 48 a 72 horas, dependiendo de la edad de la paciente) y se realiza una sesión cada 10 años. ¿Qué tal?
Y tú, ¿ya te pusiste manos a la obra en la tarea de cuidar tu cuello?
Imagen CC Juan Nosé