Pensando en ellos: cómo cuidar la piel después de afeitar

¿Cuántas veces al besar a tu pololo te pincha con la barba? Al afeitar la piel se deshidrata, por lo tanto puede quedar irritada. Estos efectos no se pueden anular pero se pueden reducir.

Primero hay que saber que el mejor momento para afeitarse es después de la ducha. El agua caliente y el vapor hacen que los poros se abran y el vello queda más blando. También, es importante usar un gel o espuma de afeitar, hay que dejarlo actuar por unos segundos y luego comenzar a afeitarse. Con esto protegerás e hidratarás.

Los hombres no suelen fijarse en los productos que comprar. Existen cremas de afeitar específicas para piel con acné, atópica o sensible. Es importante que ellos conozcan su piel y el nivel de irritación que suelen tener, para escoger correctamente el producto.

Luego, al igual que las mujeres cuando se rasuran, el vello debe ser atacado en la dirección contraria del crecimiento, así se reduce la irritación.

Cuando se está listo, el agua fría ayudará a cerrar los poros nuevamente. Cada dos o tres días es bueno que los hombres se exfolien, ya que así podrán controlar los pelos que queden incrustados.

Usar cremas posteriores al afeitado es la clave de todo el proceso, sobre todo si tiene aloe vera. El rostro debe estar seco y la aplicación debe ser cuidadosa. Ojo con los productos que contengan alcohol.

Si la barba es muy larga y lleva mucho tiempo, deberán tener más cuidad con la piel, sobre todo usando protección solar, ya que la piel de esa zona no se ha visto expuesta directamente a los rayos del sol.

Por último, hay que esperar entre dos o tres días para volver afeitarse. La piel debe descansar.

Una opción poco tradicional es utilizar cremas depilatorias femeninas, pero debe existir máximo cuidado con las reacciones alérgicas. Esto sirve para después de afeitarse. Los ingredientes que contienen, evitan el enrojecimiento e irritación de la zona. La crema para erupciones también ayuda a evitar las irritaciones futuras y erupciones después de afeitarse.

Imagen CC Stokpic