Si alguna vez te dijeron "ricitos de oro" o "pelito de muñeca", de seguro es porque de niña tenías el pelo rubio y a muchos les llamaba la atención ese lindo tono de cabello. Luego, con el correr de los años, muchas fueron perdiendo ese toque dorado, debido a los aditivos químicos de los shampoos y acondicionadores, la calidad del agua, etc. Hoy, lo más probable, es que tus hijas o hijos también tengan ese pelito claro que no quieres que pierdan. Para que esto no ocurra, acá te damos unos sencillos trucos caseros para que mantengas ese rubio natural en tus pequeños.
1. Infusión de manzanilla: la idea es que tomes las hierbas de manzanilla y las hagas hervir en dos a tres litros de agua. Luego, cuando le laves el pelo a tu hija/o, tomas la preparación, ya tibia y colada (sin restos de hoja) y la utilizas en proceso de lavado. Es decir, en vez de mojar el cabello con agua normal, lo humedeces con la infusión, luego utilizas el shampoo para niños y lo vuelves a enjuagar con esta planta. Se debe repetir el mismo proceso con el acondicionador, dando finalmente un pequeño enjuague con agua tibia. Este truco no solo permitirá que tus hijos conserven su rubio natural, sino es que además les ayudará a fortalecerlo y a tener un brillo encantador.
2. Evitar usar colonia en el pelo de los niños/as: si bien es sabido que no es recomendable rociar colonia directamente en el cuerpo de los niños, muchos piensan que sí se les puede poner en el pelito. Eso es algo totalmente contraindicado, debido al alto contenido de alcohol y otros químicos que contienen estas fragancias (incluso las de bebe), contribuyendo al opacamiento y debilidad del cabello
3. Vinagre blanco: cuando toque la hora del baño de tus pequeños, rocía en tus manos unas 3 gotitas de vinagre blanco para darles un suave masaje en el pelito. Debes esparcir este líquido desde el cuero cabelludo hasta la punta; luego lavar y enjuagar con normalidad. Recuerda, que todo tratamiento debe ser realizado de acuerdo a la tolerancia de cada persona - o niños, en este caso -. Es decir, si notas que el olor del vinagre es un poco fuerte para ellos, suspende inmediatamente su uso. Ahora, si los niños no rechazan el aroma, repite el procedimiento cada 15 días.
Como ves, con sencillos trucos puedes ayudar a que tus niños conserven ese rubio natural tan codiciado en la actualidad. Lo más probable es que los cuidados que tengas con los pequeños de hoy, te los agradezcan los adultos de mañana.
Imagen CC Shad Barney