Esto de elegir una crema para el rostro es todo un tema, porque al comienzo no sabemos cuál es la indicada para nuestra piel o edad, si todas producen un efecto similar. Sin embargo, cuando ya llevamos un par de años usando una humectante, sabemos que tarde o temprano debemos dar el salto a aquellas que combaten las líneas de expresión. El problema es que a la hora de elegir una crema antiarrugas existen muchas opciones disponibles en el mercado, con marcas, precios y características distintas. Pero si se trata de comprar alguna, hay que buscar en ellas componentes que efectivamente ayuden a atenuar las arrugas. Si quieres cuáles son, acá encontrarás algunas ideas.
Ácido Hialurónico
Este compuesto se encuentra en varias partes de nuestro cuerpo, como por ejemplo en la epidermis o el líquido sinovial (que es el que está presente en nuestras articulaciones). Es considerado uno de los componentes estrella de una crema antiarrugas, debido a que tiene la capacidad de retener el agua y re hidratar la piel, haciéndola más firme, tersa y atenuando las marcas de la edad.
Coenzima Q-10
Es muy parecida a una vitamina y además de prevenir el daño ante la exposición solar (protege de radicales libres y radiación UV) , también es útil para ser usada en las arrugas del contorno de ojos. Además, retarda el envejecimiento y favorece el correcto funcionamiento de las membranas asociadas a las células, disminuyendo la oxidación en el cutis y frenando la reducción de colágeno. Conjuntamente, poseen efectos anti inflamatorios en la piel.
Creatina
Esta sustancia puede encontrarse en las células nerviosas, así como también en nuestros músculos y busca mantener funcionando, en nuestro organismo, su sistema de protección y reparación, además de que el metabolismo se comporte de manera correcta. En cuanto a su uso cosmético, la creatina favorece la generación de células saludables, ralentiza el proceso de envejecimiento, ayuda a obtener una pigmentación más uniforme y además las células adquieren mayor energía.
Péptidos de cobre
Los péptidos son considerados pequeños fragmentos de proteínas y la función que cumplen los de cobre es la de un antioxidante, ya que remueven las toxinas presentes en la piel y favorecen la producción de colágeno. Por tanto, poseen un efecto regenerativo que ayuda a restaurar las zonas con arrugas o cicatrices.
Retinol
Proviene de la vitamina A, que también se utiliza para elaborar cremas antiarrugas. Tiene una función antioxidante, que es capaz de reducir los efectos de los radicales libres en la piel. También estimula la producción de colágeno, mejorando la textura de la piel y eliminando tanto las manchas oscuras como problemas de pigmentación. Además, en la dosis correcta, favorece la exfoliación constante.
Ahora ya tienes algunos datos respecto a los componentes que debes buscar en tu crema antiarrugas. Eso sí, no olvides que cada tipo de piel es distinto y algunos de ellos pueden producir irritación en ciertos rostros (ante cualquier duda debes consultar a tu dermatólogo). Ante todo, ten presente que aunque el cuidado de la piel es importante y también el sentirse más bella, las arrugas son un signo de la vida y de todo lo hermoso que hemos experimentado. Por eso, más que esconderlas la idea es atenuarlas y vivir con orgullo, confianza y seguridad en una misma, la edad que tengamos.
Imagen CC kinojam