Seamos sinceras. Cuando se trata de maquillarnos muchas veces lo hacemos a la rápida, en el auto, en el ascensor o moviéndonos de un lado a otro. Son pocas las veces que tenemos el tiempo de nuestro lado y podemos demorar cuanto queramos en embellecernos.
El hecho de que nos maquillemos la mayoría de las veces significa omitir algunos pasos y/o productos, ya que no son tan importantes como otros. Hoy les quiero hablar del delineador de labios. Si bien no es imprescindible en tu cosmetiquero, hoy les explicaré por qué es tan importante y debería convertirse en su aliado.
1.Los rellena
El delineador nos ayuda a cambiar el acabado de nuestros labios, ya que los hace ver un poco más gruesos y carnosos. Sólo deben seguir la línea natural y si son muy delgados, un poco por fuera.
2.Guía para el labial
Al momento de ponernos nuestro labial, muchas veces nos salimos de los bordes y terminamos manchándonos el rostro al intentar limpiarlo con los dedos. Pues bien, cuando delinean sus labios el paso del labial es súper rápido y fácil, ya que el delineador pone los límites y evita que manchen fuera de las comisuras.
3.Los perfecciona
A mi al menos me pasa que el borde inferior de mis labios no es muy perfecto, y con esto me refiero a liso, a una línea bonita. Por lo tanto, el delineador me ayuda a mejorar los bordes y lograr el estilo de labios que a mí me gusta.
4.Ayuda a la duración del labial
El delineador puede ser usado de dos maneras: una, sólo como delineador (es decir, lo utilizan para bordear los labios) o también pueden rellenarlos con él. Cuando lo utilizan de esta manera va a actuar como una base del labial, por lo que ayudará a su fijación y duración. Se darán cuenta de que su color de labios durará muchas más horas que cuando no aplican el delineador.
¿Qué les parecen estos usos del delineador de labios? ¿Lo utilizan? ¿Le darán una oportunidad luego de leer sus ayudas? A mí en lo personal me encanta y tengo en distintos tonos, porque claramente debemos usar uno que vaya acorde al labial que aplicaremos.
Imagen CC Kamil Porembiński