En más de una ocasión deben haber escuchado hablar de las sombras neutras, cálidas y/o frías, pero quizás no todas han sabido a qué colores se refieren precisamente. Al igual que con el tono de nuestra piel, las sombras podemos categorizarlas en distintos grupos, y hoy veremos qué colores entran en las neutras, cálidas y frías.
Sombras neutras
Se les categoriza así a aquellas sombras con tonos cafés que no son muy coloridas ni llamativas. Entran aquí toda la gama de marrones y también podemos encontrar sombras más suaves e iluminadoras que tiran hacia los blancos. Tonos en cobre y bronce también pueden ser considerados neutros. La característica principal de estas sombras es que no son muy intensas.
Sombras cálidas
En este grupo de sombras encontramos los colores rojos, los cafés, dorados, bronces, naranjas y algunos colores neutros como los tierra o los ocres, por lo que muchos colores que se encuentran categorizados como neutros son también cálidos.
Sombras frías
Aquí tenemos toda la gama de azules, blancos, los rosados pálidos, los grises, colores plata y morados. Siguiendo con el modelo anterior, estos tonos van bien con las pieles frías.
Como todo en el mundo del maquillaje, las referencias y recomendaciones de los tonos de acuerdo al tipo de piel son consejos, pero no reglas. Si eres de piel cálida y te gustan los tonos fríos, no hay problema. Cada una adecua los colores como quiera ocuparlos.
Imagen CC Courtney Rhodes