En busca del rizado perfecto de cabello, encontré una técnica súper sencilla y fácil de hacer. Sin duda, la que me ha dado mejores resultados en mi melena mediana. ¿Quieres aprenderla? Entonces sigue este tutorial.
Materiales
- Un cabello seco (ojalá no esté recién lavado, porque el pelo suele estar demasiado dócil en este momento. Mejor lávalo durante la tarde y sigue este tutorial en la noche).
- Hojas de papel usadas (¡Que viva el reciclaje!)
Cómo hacerlo
1. Toma la hoja de papel y córtala en cuatro trozos.
2. Dobla cada trozo de la siguiente manera: A lo largo primero por la mitad, luego esa mitad en otra mitad (Asegúrate de que quede duro pero flexible)
3. Tras tener tu cabello perfectamente cepillado, toma una sección y comienza a enrollar en cada uno de los papeles previamente preparado. Hazlo de manera firme y hasta llegar dos dedos aproximadamente cerca de la raíz.
4. Toma las puntas del papel que quedaron sueltas (el pelo debe quedar enrrollado al medio) y amárralas fírmemente. Repite este proceso en cada mechón que quieras rizar.
5. Espera algunas horas (a mí me da resultado esperar unas dos o tres; pero si quieres más definición, te aconsejo seguir el proceso durante la noche y dormir con los bucles de papel. No molestarán para nada)
6. Toma cada bucle y desata su amarra. Luego estira el papel y sácalo con un ligero tirón. Deja que los rulos queden en la posición en que se hicieron (Sí, pareces una oveja pero no te preocupes).
7. Tras soltarlos todos con tus dedos comienza a peinarlos. El uso de laca es opcional. Hazlo siempre rociando el producto desde lejos y tras haber peinado los rizos como quieres que queden. ¡Voilá! Tu pelo está perfectamente rizado sin recurrir a ningún tipo de calor. Si quieres ondas más pesadas, aplica cualquier crema de peinar en las puntas. A mí no me gusta hacerlo, porque mi pelo es tan naturalmente liso que ese proceso desarma las ondas.
¿Lista entonces para lucir unos rizos de ensueño?
Imagen CC Camilla Soares