En el mercado puedes encontrar gran variedad de té que ya distan mucho del que toma tu abuelita. Los hay de todos los tamaños, sabores, colores y olores. Y si bien puedes escoger el que te plazca basándote sólo en tu gusto, también puedes hacer esa elección para hacerle un cariñito a tu cuerpo y a tu salud en general. Y para mí la respuesta es una: el té verde. Esta bebida milenaria, es realmente buena y es ideal para que la incluyas en tu rutina diaria:
-Está lleno de antioxidantes. Los antioxidantes, que se encuentran en frutas, vegetales, café, té, cacao y vino, combaten en nuestro cuerpo a los radicales libres, que se crean en el organismo durante la digestión. Éstos atacan a las células, produciendo envejecimiento y problemas de salud. El té verde tiene un montón de antioxidantes a tu disposición.
-Es muy bueno para reducir las concentraciones de colesterol LDL y triglicéridos en sangre, aumentando la concentración de colesterol HDL, bueno para nosotras.
-Te ayuda a desintoxicarte, ya que es capaz de acelerar la actividad de las enzimas que luchan contra los desechos en el intestino delgado, como también los desintoxicantes en el hígado y pulmones.
-Entre todas las variedades de té, el verde destaca su alto poder diurético. De hecho, se convierte en una de las mejores armas para combatir el sobrepeso. No sólo favorece la eliminación de líquidos, sino que estimula el metabolismo para deshacerse de las grasas
Un tip importantísimo para que disfrutes de su poder quemagrasa: debes beber al menos 3 tazas de té verde cada día. Las catequinas, antioxidantes que se encuentran en grandes cantidades en el té verde, han demostrado ser útiles para promover la pérdida de peso, especialmente la grasa abdominal que es una de las más “molestas” que tenemos las mujeres.
Y si te gusta acompañar tu té con limón, esto te puede beneficiar más (lo mismo si es lima, naranja o pomelo). Con estos cítricos, tu cuerpo usará más catequinas del té y eso se traduce en mejor quema de grasas.
Eso sí, debes recordar que no hay bebida que haga milagros. Si no llevas una dieta sana y haces ejercicio, no importa si te bañas en té verde. El té puede ayudar, pero tú debes poner de tu parte.
Imagen CC Yamanaka Tamaki