Si quieres salir y llevar tus uñas bonitas, o simplemente te gusta cuidarlas y mantenerlas perfectas todos los días, acá van los pasos para que lo consigas en tu propia casa. Es muy sencillo y rápido. Primero, es necesario que tengas un kit de manicure. Este consta de un cortauñas, una lima, un cortacutícula, un removedor de cutículas, crema para manos, algodón y por supuesto ¡esmaltes!
En esta ocasión, junto con hacer la manicure, pintaré las uñas con francesas. Una técnica muy delicada y que siempre se ve bien.
Primero, hay que tener las uñas limpias. Esto quiere decir que no deben haber rastros de esmalte. Luego, hay que cortarlas y limarlas de la forma que tú quieras: cuadradas o redondas. Una vez listas tus uñas, debes aplicar una crema y posteriormente remover la cutícula. Esto significa que debes deslizar el removedor de cutícula desde la punta hasta el final de la uña.
Luego debes raspar la uña hasta que salgan los restos de crema y durezas. Hay que hacerlo con cuidado para que no duela. Una vez que hagas eso, los residuos retíralos con un pequeña escobilla húmeda.
Ahora, toma con cuidado tu cortacutícula. Suelen dañar si no los utilizas bien. Como ya removimos la cutícula, está debe estar lista para ser cortada (lo notas cuando ésta sobresale). Con mucho cuidado debes cortar por partes esta zona.
¡Y ya está! Ya tienes tu uña limpia y lista para ser pintada. Como ya dijimos, vamos a utilizar la técnica francesa. Puedes aplicar el color que desees, tus uñas lucirán muy delicadas, limpias y bonitas.