Toda mujer gusta de llevar las uñas largas y bien pintadas. Pero a veces, éstas no tienen el cuidado necesario para lucir hermosas; es por esto que a continuación les daré a conocer cómo cuidarlas uñas para que no se quiebren fácilmente.
Comencemos por remojar de 15 a 30 minutos las yemas de los dedos en media taza de aceite de oliva, cada noche antes de acostarnos. Así, las uñas se hidratarán, evitando el resecamiento y posteriores quiebres.
Otro tip de muy buenos resultados es remojar entre 5 y 10 minutos las uñas en un bol con agua, agregar una cucharadita de cola de caballo seca (alta en sílice, que las refuerza) y otra de consueldas ya hervidas. Se repite varias veces por semana.
Ambas tips son utilizados para que las uñas no se quiebren y luzcan maravillosas pasadas las semanas.
Otra receta casera es masajear las uñas con aceite de ricino (alivia cutículas y las uñas resecas). Agregar una gota de éste a cada una y frotar en forma de círculos, así la uña se fortalece y adquiere brillo.
Por último, en un recipiente podemos extraer el jugo de una naranja o un limón y agregar azúcar; luego, introducir las uñas por algunos minutos, sacarlas y frotarlas con una bolita de algodón empapada en aceite de almendra. Realizar a diario y antes de dormir.
Las uñas quebradizas se pueden evitar de varias maneras, como por ejemplo: Lavar los platos una vez al día usando guantes, consumir proteínas y ácidos grasos, mantenerlas cortas, no rasparlas y limitar el uso del quitaesmalte, entre otros.