Hace unos días, paseando por Falabella divisé el stand de Kiehl's, y me decidí a revisar algunos de sus productos. Durante todo el mes de julio se encontrarán especialistas en el cuidado facial presentándonos sus cremas y productos de belleza. En mi caso, me atendió Ester, con quién conversé acerca de mi problema de dermatitis, lo que me hace tener una piel extremadamente sensible a las agresiones del medio ambiente.
Su recomendación fue clara: me sugirió la crema Ultrafacial, y me contó que ésta fue testeada en las alturas del Everest, Himalaya en 1988 y en 2005, en una expedición a los glaciares de Groenlandia. Esto para comprobar su efectividad en climas extremos y su cuidado con la piel.
Como persona altamente alérgica, es común que muchas veces compre productos que luego tendré que dejar a un lado porque me dieron alergia al tercer día de uso. Por eso, lo genial de este stand de Kiehls es que además se encontraban entregando muestras de sus productos, para así comprobar cual era su efecto en mi piel.
Cada sachet de la crema traía 3 ml, los que duran bastante (al menos 3 días) ya que se necesita sólo una pequeña cantidad para abarcar todo el rostro. Pude comprobar la suavidad e hidratación que tuvo mi piel durante su uso.
El envase original trae 50 ml y su precio ronda los 20 mil pesos. Los cuales, personalmente, creo que son absolutamente bien invertidos debido a lo mucho que dura y sus características ideales para pieles alérgicas.