Jennifer Lawrence es sin duda una de las actrices más hermosas de la industria del cine, no sólo por sus espectaculares curvas sino también por su carisma y simpatía.
Es que esta actriz es divertida, natural y no teme en decir lo que piensa. Estas características la hacen destacar dentro de su entorno, ya que mientras todas están preocupadas de lo que comen, gastan u opinan de ellas, Jennifer se dedica a disfrutar de la vida y hacer lo que más le gusta: disfrutar de un rico postre.
Cabe recordar que durante la ceremonia de los premios Oscar de este año, Jennifer tuvo un pequeño incidente al tropezar y caer mientras subía la escalera para recoger su premio. Sin un ápice de vergüenza agradeció el galardón e incluso hizo un chiste sobre el asunto, sacando más de una carcajada en la audiencia.
Pero eso no es todo: hace poco enfrentó a Joan Rivers, ícono de la cirugía plástica y animadora del show Fashion Police, donde destaca por sus ácidos y muchas veces ofensivos comentarios. Jennifer ha sido una de las pocas actrices que la ha enfrentado diciendo que el programa entrega “valores erróneos”, ya que disfruta al humillar personas sin tomar en cuenta los efectos que esto puede tener en las generaciones más jóvenes.
A sus 23 años sabe que se ha convertido en un modelo a seguir para muchas jovencitas, por eso no quiere que ninguna deje de comer para parecerse a su personaje de Katniss en los “Juegos del Hambre”. Sabe la importancia de un peso saludable y no le importa que le digan que es obesa para los cánones de belleza de Hollywood. Por todas estas razones, es y será la actriz más bella de la industria del cine del último tiempo.
ImagenCC: BeeniAktor