¡Ahh! Javiera Díaz de Valdés ¿cómo describir lo linda que considero a esta mujer? Quizás a ojos de la mayoría no sea muy agradable, pero con ese look no necesita serlo. Sí, algunas son de lo más suertudas y la madre naturaleza las premia con una buena genética. Es así como no dependen de la simpatía que puedan generar en el resto.
Lo que me gusta de Javiera es que tiene una belleza de lo más natural. Una la puede ver a cara lavada y se percata de que su tema no es una ilusión óptica. Tiene un garbo clásico que me hace pensar en Audrey Hepburn o Natalie Wood de manera casi inmediata. Eso se valora, sobretodo en tiempos en los que la belleza se ha comenzado a guiar por cánones cada vez más recargados y plásticos.
Otro punto que me hace quererla es que constituye un estandarte para las que tenemos las cejas pobladas, haciéndonos notar que no es necesario dejarnos un hilito en ellas para vernos bien. Encuentro que son éstas las que definen la personalidad y carácter en una persona. En Javiera eso queda más que demostrado.
Creo que no soy la única que piensa que es bonita y por eso, junto a dos personalidades femeninas más, se convirtió en rostro de la tienda Ripley (www.ripley.cl)
Pero también encuentro linda a Javiera por su personalidad. Tiene una actitud bastante frontal e irreverente, cosa que no entra bien en sociedades medias complacientes o mentirosillas como la nuestra. Por ejemplo, cuando pasó todo este tema con Inés Pérez y las empleadas domésticas, ella no halló nada mejor que juntarse con su amiga Juanita Vial y meterse en la piscina de un condominio vestida de nana…¡seca!
Finalmente, otra de las cosas que me gustan de la Javi es que es catlover. De hecho, tiene una gata llamada Juanita y cuando ésta se perdió tenía a todos sus contactos de Twitter pensando en dónde estaría. Yo amo a los felinos y encuentro a la gente que gusta de ellos bastante atractiva.
Imagen CC Youtube